Grasas saludables: cómo distinguirlas y utilizarlas
Salud

Grasas saludables: cómo distinguirlas y utilizarlas

Solemos creer que la palabra grasa es mala palabra para la salud, pero no es tan así. Porque las hay saludables y por lo tanto, necesarias. ¿Cómo distinguirlas? Te ayudamos a reconocerlas y a evitar las perjudiciales.

La Lic. en Nutrición Marisa Canicoba (MN 1353 MP 052), Directora Carrera Especialización Nutrición Clínica Sede Hospital Posadas (UBA), miembro del staff del Centro de Diagnóstico DIM explica: “En una dieta saludable, las grasas alimentarias son parte importante de la alimentación ya que aportan energía, vehículo de vitaminas, contribuyen a dar saciedad y palatabilidad a los alimentos y cuya calidad tiene una profunda influencia sobre la salud”.

¿Cuáles son? Las que encontramos en:

– pescado de mar (por ejemplo atún)

– frutas secas (ejemplo nueces, maní)

– aceite de oliva

– semillas

– aceitunas

– palta

– huevo

La ingesta de grasas no saludables puede aumentar el riesgo de colesterol alto y de enfermedad cardíaca. Para eso, nos recomiendan reducir las grasas saturadas evitando los siguientes alimentos:

– manteca

– quesos duros

– helados

– cremas

– algunas galletitas

– comidas rápidas

– carne grasosa

– algunos aceites vegetales (de palma, de coco).

¿Y las famosas grasas trans? La Lic. Canicoba detalla: “Los ácidos grasos trans son grasas perjudiciales para el organismo ya que existe evidencia suficiente de su relación con la enfermedad cardiovascular. Se forman cuando el aceite de origen vegetal se endurece. Se utilizan en la industria para conservar alimentos por un tiempo prolongado”. ¿Cómo la distinguimos? Se la usa para cocinar en algunos restaurantes, o se la utiliza en algunos productos alimenticios como leche y derivados, margarinas, productos de pastelería, productos de copetín, alfajores, baños de cobertura, manteca de maní (que ha sido hidrogenada), por ejemplo.

Tanto para evitar las no saludables como para saber incorporar las saludables equilibradamente, siempre es recomendable un plan alimenticio personalizado de la mano de una profesional.